MELCHOR DAZA, Superhéroe de Potosi |
Revista "ECOS" Sucre, 11 de noviembre 2018 Nº 371
Texo: Periodista Juan José Toro Montoya. Archivo de Ernesto Daza y del autor
del artículo
Es difícil ,o, mejor, imposible encontrar en la historia potosina, e incluso boliviana, un personaje con los atributos de Melchor Daza de Oré
Por lo que se va a indicar en este artículo -pues
ocuparse de él amerita volúmenes enteros- es fácil comprender de
que su figura sobre pasa a la de prácticamente todos los héroes
potosinos, incluido Alonso Yañes -mal llamado, Alonso de Ibañez-,
Tomás Katari y Cornelio Saavedra. Yañez, Katarì y sus hermanos
protagonizaron sublevaciones que finalmente fueron sofocadas,
sembrando semillas de rebeldía pero no consiguieron el anhelado
objetivo de la libertad. |
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¿Qué es lo que hace que Daza
sobrepase a otros héroes potosinos?. El hecho de haber participado en la mayoría
de las batallas importantes de la Guerra de la Independencia, el haber
sobrevivido a todas ellas para convertirse en uno de los fundadores de Bolivia
y, no conformarse con eso, haber seguido combatiendo hasta lograr la real
independencia de la patria.
Fue uno de los líderes -y quizás hasta el cabecilla principal- del alzamiento
del 10 de Noviembre de 1810 y, a partir de ahí, no paro de combatir. Cuando el
ejercito de Juan José Castelli llegó a Potosí y se encontró que el gobernador,
Francisco de Paula Sanz, el presidente de la Real Audiencia de Charcas., Vicente
Nieto y el general José de Córdova y Rojas habían sido tomados pricioneros. Daza
se puso a las órdenes del jefe porteño. La razón para ello es obvia: en 1810 la
gran mayoría de los charquinos se consideraban rioplatenses así que muchos como
él se pusieron a las ordenes de a Junta de Buenos Aires.
Una vez que el ejercito rioplatense, Daza empezó a combatir y no paró ni
siquiera cuando Bolivia fue fundada. Llegó a pelear, incluso en la Batalla de
Ingavi, bajo las ordenes de José Ballivian
EL ALZAMIENTO DE
POTOSÍ |
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puesto que,
"pasadas
las primeras alteraciones fue (sic) que tuvieron ocultos manejos de una docena
de hombres, que quisieron aprovechar las circunstancias en favor de la
libertad con tal motivo salieron para La Paz el Dr. Mariano Michel y Mercado,
el Dr. (Bernardo) Monteagudo para Potosí y otros a otras partes". Lo
que pretendían estas comisiones era lograr la adhesión de esas ciudades al
alzamiento de La Plata. La conspiración de los potosinos no paso desapercibida
por el gobernador Sanz, quien mando a encarcelar a varios de los implicados en
la conjura.
Y aquí surge un elemento clave a la hora de estudiar el alzamiento potosino. A
menudo se dice que, por su vocación realista, los potosinos no querían
sublevarse y se vieron obligados a hacerlo ante la noticia del triunfo de las
armas rioplatenses en la Batalla de Suipacha. Pero los datos de los
"Apuntes..." y de otros historiadores, como Subieta Sagarnaga coinciden en
señalar que el levantamiento potosino fue motivado por Monteagudo, quien
habría viajado secretamente a la Villa Imperial con el fin de conseguir
adherentes a la causa de Chuquisaca y de la Junta de Buenos Aires. Los
encarcelamientos ordenados por Sanz son otra prueba de una conspiración que
estuvo en marcha mucho antes de la llegada de los porteños.
EN LA GUERRA DE LA INDEPENDENCIA 1.- Derrota de Guaquí, 20 de
junio de 1811 |
Subieta Sagarnaga también habla de Mariano Subieta,
que "aun no había cumplido 19 años cuando ingresó á la sociedad secreta que
en 1809 se fundó en Potosí en favor de la causa americana y marchó de
comisionado a Chuquisaca para entrar en acuerdos con los patriotas que preparan
el movimiento revolucionario del 25 de mayo".
Según Ernesto Daza Rivero, su tatarabuelo había sido contactado con Bernardo
Monteagudo.
"Como se tiene documentado, Melchor Daza encabezó el levantamiento del pueblo
de la Villa Imperial liberando a los prisioneros Mariano Subieta, Salvador
Matos, los hermanos Juan José, Mariano (el mayor), Mariano (el menor) Alejo y
demás integrantes de la familia Nogales, Joaquín de la Quintana, los hermanos
Millares, Pedro A. Azcárate, Eustaquio Eguivar , Diego Barrenechea, Mariano
Toro, Manuel Orozco y Pedro Costas, quienes estuvieron presos por ordenes del
general Nieto y del gobernador Francisco de Paula Sanz, incorporándose todos
ellos al movimiento revolucionario" afirma.
EN TODAS PARTES
Tras el fusilamiento de los jefes realistas, se marcha con Castelli: "Don
Melchor Daza se unió al ejercito auxiliar en Potosí. Actuando primero en el
regimiento "Hustares de la Patria" como teniente graduado del mismo, habiendo
intervenido con ese grado en la Batalla de Huaqui, producida el 20 de junio de
1811 batalla victoriosa para las armas de la corona española" señala su
descendiente.
"Derrotado, el primer ejercito auxiliar enviado por la Junta de Buenos Aires
tuvo que huir, vía Potosí, hasta el norte, estableciéndose en norte argentino,
estableciéndose en Jujuy y Salta, donde combatió Melchor Daza por la
independencia patria", agrega.
Toda la documentación al respecto señala que Melchor Daza permaneció con el
ejercito rioplatense, al que sentía como suyo y estuvo con este hasta el final
de la guerra. Tenemos, entonces, a un personaje excepcional que no solo
participó en uno sino varios hechos históricos. Comenzó conociendo el acíbar de
la derrota, en Guaqui, pero luego participó en acciones ten memorables como las
batallas de Tucumán y Salta. Tras la muerte de Manuel Ascencio Padilla, Güemes
lo envía a apoyar a su viuda, Juana Azurduy, así que combatió junto a la célebre
guerrillera. Pudo ocurrir lo mismo con Camargo pero llegó tarde al área de la
guerrilla de Cinti, cuando su líder ya había sido ejecutado.
En este periodo es preciso resaltar su participación en la Batalla de Pichincha,
con la que Sucre consiguió la libertad del territorio que hoy se conoce como
Ecuador. "Estuvo en la celebre Batalla de Pichincha", en la que comandó
el batallón argentino "Cazadores a Caballo". La victoria alcanzada el 22
de mayo de 1822 constituyo uno de los grades hitos de la emancipación de la
América hispana, escribió Eduardo Trigo.
EN
LA REPUBLICA |
También es digna de
mencionar su participación en la Batalla de La Tablada. en la que combate
bajo las ordenes de Gregario Araoz de la Madrid. Sobre esta, Trigo escribe
que "el jefe argentino en informe elevado al general Manuel Belgrado le
decía entre otros conceptos: "La bravura de todos los oficiales y tropa,
los hace acreedores a espacial consideración de Vuestra Excelencia, pues
desde que tengo el honor de militar bajo las ordenes de la Patria aseguro a
Vuestra excelencia...que no he visto batirse jamás con igual energía, porque
todos a porfía se han distinguido...Mis ayudantes don Manuel Cainzo, don
Melchor Daza y don Manuel Rico, lo mismo que mi segundo benemérito sargento
mayor Don Antonio Giles...han desempeñado sus funciones con el valor y
denuedo debido..."
Todo lo escrito hasta aquí daría motivos suficientes para honrar la memoria
de Melchor Daza como el máximo héroe de la Villa Imperial de Potosí, digno
no solo de reconocimientos sino también de leyendas, a fin de recordarlo en
el campo de la literatura, pero, como se sabe, el recuerdo que de él se hace
es más bien discreto ya que, además de un establecimiento educativo y una
calle que lleva su nombre, no existen más homenajes. No tiene una estatua ni
se lo menciona en el Himno a Potosí.
No solo participó en las acciones referidas, sino que estuvo en la Batalla
de Tumusla, que fue la que selló la independencia de Charcas. Fue por lo
tanto, uno de los verdaderos libertadores de Bolivia y, para rematar esa
condición, estuvo en la Asamblea Deliberante, así que fue uno de los
firmantes del Acta de la Independencia, es decir uno de los fundadores del
país.
Su aporte a la consolidación de la patria no termino ahí. Como todavía era
joven cuando se fundó Bolivia, le tocó integrar las tropas que resistieron
la primera invasión peruana, estuvo en las campañas de la confederación
Perú-boliviana y, por si fuera poco, actúo bajo el mando de Ballivián en la
Batalla de Ingavi. No solo fue un héroe...fue un superhéroe.
Esta condecoración – insignia, la tienen aquí presente, como un
verdadero homenaje a la memoria de Melchor Daza en ocasión de
conmemorarse el Bicentenario de la Batalla de Tucumán y de la
Bandera de Belgrano. (Ernesto Daza Rivero) |
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