GRAL. MANUEL MARZANA OROZA |
Marzana es quizás el mayor
héroe boliviano de la guerra del Chaco, el simboliza al medio millar de
bolivianos que defendieron, muchos de ellos con su vida, el fortín Boquerón.
Gral. manuel Marzana
oroza nació en
Tarabuco (Chuquisaca) el 7 de junio de 1889. Estudio en Sucre.
Ingreso al colegio militar en 1907. En 1914 logro el grado de
teniente. Fue edecán del Presidente Gutiérrez Guerra. En 1925
formaba parte del Consejo Supremo de Guerra. Fue parte del tribunal
de Justicia Militar entre 1930 y 1931. En el comienzo de la guerra después haber tomado el Fortín Paraguayo “Boquerón” y tras la muerte del Cnl. Emilio Aguirre, asumió como comandante del glorioso Regimiento Campos 6 de infantería, siendo sin duda alguna el gran caudillo de la estoica y por demás sacrificada defensa de ese fortín. La consigna del destacamento estaba expresada en un radiograma del Estado Mayor: “El Capitán General ordena y la patria pide no abandonar Boquerón de ninguna manera, prefiriendo morir en su defensa antes de dar el parte de retirada". |
Quebrantar la ofensiva
paraguaya en este punto será suficiente para desmoralizar al Enemigo y sobre
todo para dar un desmentido ante América de otra propaganda paraguaya sobre la
incapacidad de nuestras tropas”. Marzana dijo simplemente a sus hombres: “Hijos
vamos a hacer respetar el uniforme que vestimos, ningún soldado debe retirarse
hasta haber quemado el último cartucho”.
Las fuerzas con las que disponía no eran 1.200 como calculaba Estigarribia, sino
un Tcnl. Comandante del Fortín, un
Tcnl. Comandante de Batallón, un Mayor, 4 Capitanes, 7 Tenientes, 14
Subtenientes, 2 médicos, un sanitario, un chofer, 320 soldados del Regimiento
“Campos”, 40 soldados del Regimiento 16 de Infantería, 24 soldados del
Regimiento “Lanza” y 30 de Artillería, haciendo un total de 448 personas armadas
de 350 fusiles, 13 ametralladoras livianas, 2 cañones Krupp con 130 granadas, un
cañón Schneider, con 66 granadas y dos cañones antiaéreos con su dotación
correspondiente.
Los bravos defensores se quedaron sin munición, alimentos y medicinas, para
poder seguir combatiendo y escribiendo tras 20 días de valiente y sacrificada
defensa las páginas más heroicas que se hayan escrito en el continente.
Sus principales características eran la serenidad y la modestia, Oficial educado
desde su juventud en la rígida escuela de la “Subordinación y constancia”
era uno de esos soldados para quienes una orden que se da es una orden que se
cumple. Fue hecho prisionero junto con sus hombres siendo conducidos a Asunción.
El Presidente Paraguayo Eusebio Ayala al referirse en un discurso, tributó un
noble homenaje a los vencidos: “Los Oficiales y Soldados bolivianos que se
batieron en Boquerón y son nuestros prisioneros... se comportaron con tal
bravura y coraje que merecen todo nuestro respeto”. A su retorno del cautiverio
en 1936, el
Cnl. Marzana al ser requerido por un diario de La Paz para hacer declaraciones,
dijo simplemente: “NO HICIMOS MÁS QUE CUMPLIR CON NUESTRO DEBER”.
En mismo ese año fue nombrado prefecto de Chuquisaca. En 1937 fue ascendido a
Coronel. En 1962 el senado lo nombro de modo honorífico General de Brigada.
Murió a los 90 años en La Paz el 4 de Enero de 1980